domingo, 1 de noviembre de 2009

DEL PERRO VAGABUNDO A UN DISCÍPULO YEG


A los amigos del Discípulo Amado
A Saúl Ramírez por sus hermosos versos

Tratemos que nuestro amor sea siempre, el amor que siempre soñamos. Sé que necesitas de caricias y palabras dulces para no herir tus sentimientos, ni que te sientas sucia como una vulgar libidinosa o un engendro concebido o considerado como una imperfección de la naturaleza o divina.

Vives condenado a enamorarte en silencio, a destrozarte por dentro, mientras te desgarra el observar a la belleza que te seduce a lo lejos… como un sueño imposible. Eres la sombra fugaz de una estrella, perseguida y asediada como una hermosa mariposa, hasta en el último rincón de esta absurda galaxia, donde el amor parece ser un extraño o privilegio de unos elegidos.

Tienes un alma hermosa, rebelde, guerrera, atrapada en un lugar confuso o tal vez, en un cuerpo equivocado. Sé que te consideran poco casto, delicado como los pétalos de una hermosa flor o una indelicada mariposa murte; no eres de esas indelicadas locas o de esos maricones que producen más asco que nauseas y que se conforman con ser escoria humana… eres un hermoso león… un hermoso hembro… un oasis de tristezas y dolorosas nostalgias.

Déjate arrullar como las hojas se dejan consentir por la brisa y la lluvia del verano del invierno. Aprende a vivir y a gozar como esos niños que solo ven lo que quieren ver, y son lo que desean ser, gracias a esa hermosa esquizofrenia de su imaginación. La gente te censura como si fueras un sucio caníbal o un efebo indecoroso, escandaloso e inmoral, que es feliz alquilando o vendiendo su carne a los colmillos despiadados de las pirañas humanas.

Nunca dejes de vivir la vida en vida. Ábrele las ventanas de tu corazón, para que entre la savia de la existencia y el hermoso canto de la naturaleza ¡No coactes las emocionantes olas de tu sentir! Nunca hundas tus recuerdos nocturnos en el infierno, por una limosna. Hay fracasos eternos por culpa de esos alocados olvidos; es como rozar con la piel de la muerte en vida.

Aprecio tu valor por aceptar el amor que tocó a tu vida, sin pensar en el género del rostro, sino imaginándolo bello que es vivir sin miedo, sin disfraces o actuando como absurdos o ridículos camaleones. He conocido homosexuales más machos que muchos hombres y lesbianas, más hembras que muchas mujeres. Sé que posees la nobleza, delicadeza y el corazón de un hada o una princesa cinderella; sé que no formas parte del aquelarre de las desalmadas brujas que te humillan con sus miradas y susurros soterrados.

Tienes que aprender a vivir con pasión y desenfreno el fuego de los momentos por oscuros que sean y el fulgor lóbrego y sombrío de los claros. Contemplo tu mirada y solo vislumbro amor e imágenes apasionadas en el iris verde, azul, café o negro de tus ojos. Nunca te sientas incómodo o incómoda, porque una mirada basta para proponerle a esa persona, que recorran el mismo camino, sin importar hacia donde conduzca o hasta donde tengan que hacer un alto parcial o definitivo en el camino.

¡No escapes! ¡No huyas! ¡No dejes que el miedo te prive de la felicidad! ¡Piensa que la vida es más bella de lo que imaginan los ciegos!¡La vida es más y más sabrosa que un buen café! Huye de las necias aves de rapiña, de los vándalos que intentarán castigarte, lapidarte o desollarte como si fueras una vergüenza humana. Hay bestias inescrupulosas que se avergüenzan de llevar tu misma sangre y te niegan como si fueras una detestable murte o el engendro de una maloliente bruja. Actuaste como un ser confundido, un joven o una adolescente apresada dentrote otro cuerpo. Un joven despertado por las tentaciones eróticas, como todo joven. ¿Serás victima de un Dios victimario o de la ignorancia y sevicia de las bestias iletradas?

No finjas acrecencias, que tu voz es el espejo delator. No intentes ahogar tus penas o pesadillas en alcohol, como todo necio suicida, porque ellas han aprendido a nadar. Acepta con orgullo que eres hombre o mujer, que eres lo que deseas ser, porque cuando se es gay, da lo mismo. Haz del arco iris un himno de paz, una bandera liberadora, una señal de luz para los libertos, más blanca que el corazón de una paloma armiña.

El mundo es como el fuego y no oscuro como una noche profunda y eterna. No te escondas como esas estrellas que dicen que existen pero que no vemos. Vuela como el Icaro viento y busca tu felicidad, que es el Everest de tu gloria. No te voy a hablar de pegasos o de hermosas ninfas, de Lesbos o de efebos; de pequeñas barcas que navegan a la deriva en el mar… ¡Ama! ¡Ama con pasión y con sinceridad, para que no puedas mañana vivir de esos recuerdos, sin sentir rabia o vergüenza!

Eres de la legión de los otros Cristos; de los que gritan y muerden en silencio su propia carne, de los que reciben patadas como si fueran inoportunas piedras y muchos terminarán por razones absurdas, vendiendo sus nalgas en las esquinas como los engendros murtes o el vástago del judío trampero.

Enamórate. Enamórate sin amarras, sin voltear a mirar. Piensa simplemente en escribir hermosos versos de amor. No vuelvas a llorar en silencio ni intentes cortarte las venas; disuelve el amargo de las lágrimas en un reloj sin horas, hasta que tus gemidos o gritos desnudos sean de gozo.

Piensa que tu mirada seduce desde las más bajas pasiones, hasta los sueños y delirios más sublimes. Regálale una oportunidad a tu alma y a tu vida. Vidas ciento por ciento puras no existen, así como no existen personas con sangre totalmente pura, así engrandezcan de su pedigrí.

¡Vuela! ¡Vuela hasta donde la imaginación de tu sangre, te desee llevar!… déjate arrastrar como un diente de león por la voluntad de la brisa. No eres un niño o un hombre calavera ¡Nunca lo fuiste! ¡Vive la locura de la cópula como todas las parejas! Eros es Dios, profeta, guía y sendero luminoso… siempre será el camino elegido y atalaya en donde encontraremos sosiego en el dulce nido. Tu cuerpo no es un costal de pecados, de vergüenzas, porque lo has llenado con sueños, con amores tiernos, puros, sinceros… eres parte del ri9o de la vida…una hermosa flor del paraíso… parte del paisaje de la musical primavera.

Piensa en el agua alucinadora del mar, cuando intentes saciar tu sed con ella. Pelea como los machos en celo por el amor de tu pareja y por sus espacios. Embriágate para disfrutar desbocado de los manjares de la piel y algunos se puedan liberar de esas vergüenzas tontas que los apoca por tener sexos atrofiados por la voluntad del destino o esos desequilibrios que hace únicos a quienes disponen de los dos sexos básicos y los tildan de engendros o errores de Dios…

Juega como los corceles en celo, hasta que te aparees o seas apareado, cuando el delirio loco del éxtasis te empale y te sientas fecundador o fecundado con semillas de felicidad y sueños multicolores activos o pasivos. Ya se vislumbran los frutos de los mitos o de las falsas fábulas que otros rompieron con lágrimas de sangre y depresiones casi suicidas. No te dejes discriminar nunca más en campos de concentración, camuflados como aparentes hogares; ni te dejes exiliar como una peste malata o una rata murte. Escucha las canciones y las voces de las guitarras que entonan versos de libertad. Ya no soplan despiadados vientos de violencia.

No vivas furioso con la vida o con quién te maltrató como un desalmado verdugo, para abusar de tu sexualidad. Piensa que para todos existe un Sol y un camino de espinas. Si tienes razones para odiar, olvida y perdona. Piensa que eres el hijo, el hermano, el amigo o el discípulo amado. Perdóname si fui de los bárbaros intolerante y despiadado, contigo, contigo o ¨contiga¨; ¡Qué importa tú género! O como se defina científicamente tu tipo como sexo, si hay tantos géneros como formas de pensar, de sentir y vivir el amor.

Ya nada me ruboriza, pero si siento una pena inmensa o una gran vergüenza, por haber criticado o haber sido injusto, cuando mi mirada descubría a otra persona bajo ola patina de la piel que exponía. El sexo jamás tendrá carnet de identidad ¡Cuantas vidas han cambiado por una mirada o un beso y por la permisividad que dan esas cálidas sensaciones, así se culpe a la imaginación o a las circunstancias, es casi inevitable el vivir con intensidad lo ardiente de lo prohibido. Es difícil ser indiferentes o intolerantes con el paraíso sensitivo de las ansiedades de las refulgencias turgentes y sensualmente insinuosas. Todos tenemos que vivir con honestidad, cada gota de la vida… así para muchos sea un mar y para otros un vaso con agua.

A los toros por los cuernos y citando con el pecho descubierto, como cuando se entra a estoquear a un toro sin muleta. La vida día a día hace justicia, pero necesitaba excusarme en nombre de la morbidez y hacer comprender que sin amor, no puede existir calidad de vida. Por razones del destino, todos tenemos que andar sobre una cuerda floja y no existen mallas protectoras, que nos impidan caer al fuego del río. La vida siempre será más despiadada que un juego de ruleta rusa… pero solo se vive una vez en la vida.

Con todo mi aprecio y respeto
Héctor “El Perro Vagabundo” Cediel.
Enero 2009



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